PageSpeed Insights es una herramienta valiosa ofrecida por Google para evaluar la velocidad y la usabilidad de un sitio web. Una de las advertencias o problemas que se pueden encontrar al usar esta herramienta es la «Propiedad CSS no admitida».
En este artículo, te guiaremos a través de lo que significa esta advertencia y cómo solucionarla para garantizar una experiencia de usuario óptima y un rendimiento eficaz de tu sitio web.
¿Qué significa «Propiedad CSS no admitida»?
Cuando PageSpeed Insights muestra una advertencia de «Propiedad CSS no admitida», está indicando que tu hoja de estilos contiene propiedades CSS que no son reconocidas o no están admitidas por los navegadores o la especificación actual de CSS.
Estas propiedades pueden ser errores tipográficos, características CSS antiguas o propiedades experimentales que aún no se han estandarizado.
¿Por qué es importante solucionarlo?
Aunque las propiedades CSS no admitidas a menudo son ignoradas por los navegadores y no causan daño directo, presentan varios problemas:
- Rendimiento: Cada propiedad adicional en tu CSS es un dato extra que los navegadores deben procesar. Aunque el impacto puede ser mínimo, eliminar propiedades innecesarias siempre es una buena práctica para optimizar la velocidad de carga.
- Mantenibilidad: Las propiedades no admitidas pueden confundir a otros desarrolladores o a ti mismo en el futuro, dificultando la comprensión y el mantenimiento del código.
- Compatibilidad: Usar propiedades no estandarizadas o desactualizadas puede llevar a problemas de compatibilidad en algunos navegadores.
Cómo solucionar la advertencia de «Propiedad CSS no admitida»
1. Revisa y corrige errores tipográficos
A veces, el problema es simplemente un error tipográfico.
Por ejemplo, si escribiste «pading» en lugar de «padding», deberás corregirlo.
2. Elimina propiedades obsoletas o no estándar
Es posible que estés utilizando propiedades CSS que eran relevantes para navegadores antiguos pero que ya no se necesitan debido a los estándares modernos. Revisa tu CSS y elimina o reemplaza estas propiedades.
3. Usa herramientas de validación CSS
Existen herramientas en línea, como el validador CSS del W3C, que te permiten verificar tu CSS en busca de errores o propiedades no admitidas. Estas herramientas pueden identificar rápidamente las propiedades problemáticas para que puedas corregirlas.
4. Actualiza tus frameworks y bibliotecas
Si estás utilizando frameworks CSS (como Bootstrap) o preprocesadores (como SASS o LESS), asegúrate de que estén actualizados a la última versión. Las versiones más recientes suelen corregir problemas y eliminar propiedades obsoletas.
5. Prueba en múltiples navegadores
Asegúrate de probar tu sitio web en diferentes navegadores para garantizar una experiencia de usuario consistente. Herramientas como BrowserStack o CanIUse pueden ayudarte a entender la compatibilidad de ciertas propiedades CSS en diferentes navegadores.
Mientras que una «Propiedad CSS no admitida» puede parecer un detalle menor, abordarla adecuadamente refuerza las mejores prácticas de desarrollo y garantiza que tu sitio web funcione de manera óptima.
Tomándote el tiempo para revisar, validar y actualizar tu CSS, no solo mejorarás tu puntuación en PageSpeed Insights, sino que también ofrecerás una experiencia de usuario más rápida y fluida.